martes, 9 de agosto de 2011

Palabras para el homenaje de Rosana Peiro

Tengo que escribir unas palabras para describir lo que fue Concha en el periodo que se dedicó a la PdS por la estrecha relación laboral que mantuvimos entonces y personal que ha continuado hasta ahora.

Yo hice el master de salud pública en el año 1988, ella era profesora de Promoción de la Salud, por una parte me fascinaba esa asignatura y al mismo tiempo no entendía nada.  No entendía como conceptos que a mi me parecían “políticos” de “reivindicación de calle” y “manifestación” ella los asociaba al bienestar, la calidad de vida y la salud. Estudiábamos conceptos de la Carta de Otawa (84) como la equidad, la participación, las políticas, el trabajo conjunto, los entornos o el medioambiente. Cuando acabó el master me propuso colaborar con ella en diversas actividades y acepté.

Comenzó una fase nueva en mi vida profesional, por los temas con los que trabajábamos pero también por todo lo que aprendí de su especial manera de hacer. Desde los inicios del IVESP ya comenzó con las colaboraciones con universidades europeas, el despacho de promoción de salud ya era un “melting pot” compartíamos despacho con Sara, de la Universidad de Liverpool, Leeneke de Wageningen y yo.    

Recuerdo una tarde de primavera a los pocos meses de iniciar esta colaboración que fuimos a comer a un kiosko, al sol, en la alameda, unos bocadillos, una ensalada y una cerveza. Empezamos a hablar y a hablar y hablar y a reír, a reír, y reír que no podíamos parar, risas que no paramos nunca de disfrutarlas. A partir de ahí se empezó a construir además una relación personal que fue creciendo con el tiempo. Una relación llena de complicidades personales y profesionales.
Concha estableció complicidades con mucha gente, haciendo propuestas, haciendo a la gente participe de estas, pero su risa su alegría y su mirada siempre brillante, contribuían a construir esa complicidad. 

En lo que fue el IVESP en Valencia, comenzó a poner en marcha la red de ciudades sanas, que se fue extendiendo como una mancha de aceite. Quienes estuvimos con ella en este proceso pudimos ver y aprender como los conceptos “teóricos” se aplicaban en la práctica. El éxito de esta iniciativa fue sin lugar a dudas la forma en la que lo gestionó, formando una red de verdad, donde ella lideraba el proceso, no porque hubiera un papel que lo dijera, sino por la capacidad de implicar y motivar en esta idea, por su generosidad difundiendo información, en cada ayuntamiento, fuera grande o pequeño, por su trabajo en horizontal, no jerárquico, organizando una red en la que desde cualquier lugar se podía llegar a cualquier otro, sin pedir permiso, lo que primaba era tener iniciativas, propuestas y ganas de contribuir y estas eran respetadas, incorporadas a la red. Cada ayuntamiento podía jugar el papel que quería o que podía jugar en cada momento. Se introdujeron temas de trabajo que aún ahora son novedosos en nuestro país como la salud en todas las políticas organizando grupos intersectoriales con urbanismo,  medioambiente..etc.    
Además sabía ligar lo local con lo global. Conectó la red con las redes europeas y muchos ayuntamientos tuvieron la oportunidad de conocer, participar y compartir experiencias con otros proyectos en cualquier parte del mundo.

Por otra parte siempre enlazaba la acción en salud pública a la investigación. Escribió y potenció que quienes estábamos allí incorporáramos en nuestro trabajo al análisis más técnico y científico. Ligó toda esta experiencia de desarrollo local a proyectos europeos de investigación con los que se produjeron artículos, informes, o tesis que mostraban de forma pública (sometidos a la revisión científica) resultados, debilidades, desarrollos metodológicos...     
Concha era una mujer que arriesgaba en todo lo que hacía, nunca fue por el camino fácil o conocido o reconocido, siempre innovaba. Potenció la investigación cualitativa, la investigación acción participativa, las políticas de salud, la formación y el contacto con los medios de comunicación, o las estrategias intersectoriales con procesos “win - win” o “todos ganan” como nos reíamos haciendo alusión a los juegos reunidos geyper.  Erio Ziglio me contaba en el congreso de Sevilla que no habían conseguido un proceso de trabajo intersectorial con tanta implicación como el trabajo que se desarrollo en el IVESP con Turismo, salud y desarrollo rural …y que todavía usan su metodología como caso de buena práctica. Yo participe en ese proceso, exploratorio, de aventura metodológica sobre otra manera de trabajar, de forma intersectorial, …recuerdo que cada vez que acabamos una fase teníamos que pensar como iba a ser la siguiente. Sin embargo ella hacia que quienes participábamos (y éramos un montón) tuviéramos la seguridad de que algo bueno, nuevo e innovador iba a salir de ahí. Su presencia ejercía una potente sensación de seguridad, por su autoridad moral, por su liderazgo y por su manera de escuchar, siempre atenta, siempre considerando lo que se decía, cualquiera, intentando incluir todas las opiniones.

Creo que esa forma de escuchar tan atenta y que siempre intentaba tomar en cuenta, tiene que ver también con el valor que le daba a los saberes locales, además de a los saberes científicos, o al de las autoridades reconocidas nacional o internacionalmente. Hace unos meses vino a pasar una mañana de trabajo para ver y escuchar y aprender como funcionaba un proyecto de intervención con la orientación de activos positivos en salud, en un barrio pequeño, con un grupo mujeres inmigrantes. Fue un día estupendo, en Alzira, en el que aprendimos mucho y una cena divertidísima, en nuestra casa,  en la que Concha se bailó unas fabulosas sevillanas con Antony Morgan.

En todos los lugares escuchaba con interés y conectaba, motivaba, enredaba, a las personas, a los grupos, asociaciones a quienes tienen conocimientos más técnicos con quienes viven las experiencias de la vida, de la salud y de la enfermedad con la que trabajamos y queremos contribuir a mejorar.      

Inició también varias actividades formativas en red. En Europa, el ETC “European Training Consortium” in Health Promotion, que este verano cumple la 20ª edición y que le habían invitado como reconocimiento a su labor iniciadora de esta experiencia, en valencia (91). Con Latinoamérica, en la primera parte de la década de 2000, el curso Internacional de Promoción de Salud (CIPS)  on-line, que lideró en colaboración con otras universidades latinoamericanas, permitiendo a profesionales de diferentes países, culturas y realidades socioeconómicas, compartir un espacio de diálogo para la acción en promoción de salud y equidad. Y que han continuado con FLACSO, con la Escuela Nacional de Sanidad y otras instituciones con cuestiones de género y salud.

El póster presentado en el Congreso de la EUPHA en Pamplona (1997), acerca del  desigual reparto del poder de los hombres y mujeres en el seno de SESPAS y asociaciones federadas, fue el detonante para iniciar otra red profesional, el grupo de género y salud pública de SESPAS. Núcleo de la Red de Investigación de Género y Salud del ISCIII y del Grupo de determinantes sociales y políticos de la salud del CIBERESP. Su área transversal de desigualdades y el observatorio han tenido siempre todo su apoyo.

Yo creo que he tenido una suerte inmensa de conocerla, de trabajar con ella y de ser amiga suya. No soy la única, la sensación que tenemos quienes hemos compartido esta suerte es que nos hemos empoderado, porque promovía la toma de decisiones, la responsabilidad y la implicación en el trabajo. Ha creado espacios donde nos hemos sentido a gusto, participes con lo que hacíamos, generando un efecto sinérgico grupal que me parece que es lo que hace que estemos aquí hoy, o que hayamos recibido tantos mensajes de tantas personas, con tanta pena y tanto dolor.

Nunca reñía, nunca gritaba. Siempre intentaba buscar una salida a tus propuestas, intentando considerarlas, buscando posibilidades de llevarlas a cabo. Ejercía más su liderazgo, que su jefatura, desde la autoridad moral que le daba su conocimiento del tema, su implicación, sus capacidades para motivar a quienes le rodeaban, y su visión estratégica. Nunca ejerció control sobre lo que hacías, al contario, siempre la buscabas para mejorar lo que estabas haciendo, porque seguro que tenía propuestas, soluciones, ideas, para desatascar temas, siempre desde la mirada positiva, de apoyo al trabajo realizado. Nos ha involucrado en proyectos en los que había poca experiencia sobre como intervenir, y consiguió que el trabajo fuera un espacio de creación, innovación y libertad. Siempre tenía una palabra de apoyo que ofrecer, siempre le parecía bien lo que hacías, aunque luego trabajando y discutiendo el tema, acabaras dándole la vuelta. Siempre tenía tiempo para unas risas cómplices y un mojito.

Quienes tuvimos la suerte de trabajar con ella durante estos años hemos crecido personal y profesionalmente. Hemos hecho muchas cosas y muy divertidas. Trabajamos muchas horas, más de las que marcan los relojes, pero con mucha satisfacción. Viajamos mucho juntas, a Menorca varias veces, a los diferentes congresos, fuimos a China, en el año 96, un viaje inolvidable por la experiencia y por las risas de complicidad que compartimos todo el viaje. Viajes divertidos que contribuían a fortalecer la relación personal. Pero también cenas para no dejar de ver a amigas en valencia, las cenas de valencianas en Madrid. Cómo disfrutaba de todo lo que hacía!!!!. 

Personalmente mi vida sin ella hubiera sido otra, por el momento en el que la conocí, su propuesta de colaboración, y empezar a ver toda esta otra forma de ver y hacer. Siempre he aprendido de ella. Su legado personal es mío, nuestro, de sus amigas, amigos, de Marina y de Carlos y de su familia, para que lo disfrutemos e intentemos compartirlo. No conozco tantas palabras, ni se expresar tanta pena, dolor y  rabia como siento.

El legado profesional es algo que tendremos que continuarlo para hacerlo más grande, más conocido, que se aproveche, esta en nuestra mano.
Yo creo que esta capacidad de movilización personal y grupal tiene que ver, como también más personas han señalado, en que siempre confiaba más en ti y en tus capacidades…. que tu misma. Siempre estará en mi vida, nuestras vidas.

Rosana Peiró Pérez
Homenaje a Concha Colomer Revuelta
Ministerio de Sanidad Política Social e Igualdad. 29 de Junio 2011

martes, 2 de agosto de 2011

La vida, de Narciso Medina

Estoy cansado, enfermo, enfadado…
Mi tiempo, mi vida, mis amigos y mi familia
Poco a poco se diluyen…
Se van,
Me los quita la vida…
¡Cuando pasara este infierno
Este mal sueño del que quiero despertar… ¡


Aire, sol, libertad.
Todo me falta y poco es lo que me consuela.
El amor no me basta
Quiero más, quiero todo lo que tenia antes
Lo quiero TODO.
Los recuerdos me queman
El rio de mi vida cada vez se curva y enlentece mas.


No quiero pensar
No quiero recordar
Solo vivir el día a día con alguna sonrisa.
Pensar que mañana algo bueno pasara…
Que levantaremos la mirada
Y los recuerdos volverán a ser azules
El viento refrescara un poco
Y la primavera nos traerá otra vez más amor.


Menos siempre es menos.
Nunca será más.
Pero más siempre suma
Y sumando seguiremos unidos
Con mas amor, mas deseos,
Y mas vida…


Narciso
Valencia 9 Mayo 2011